Piden más ayuda del Estado para niños desnutridos en Venezuela
Lo correcto no es decir que hay 300 mil niños en peligro por desnutrición en Venezuela, sino que hay 300 mil niños que hay que salvar en Venezuela. Así de clara es Janeth Márquez, socióloga y directora de Cáritas Venezuela, la organización de la iglesia que se encarga de monitorear zonas vulnerables por el hambre en al menos seis estados del país. Márquez afirmó en
entrevista con Radio Fe y Alegría Noticias, “con mucho dolor”, que en el último boletín realizado por Cáritas la curva de desnutrición infantil en vez de bajar, subió: de 8 % a 14,5 %.
“Siempre decimos con mucho dolor porque siempre quisiéramos que la curva bajara”, expresó.
Las estadísticas reflejan “que nuestros niños no tienen disponibilidad de los alimentos”, los cuales deberían ser en buena cantidad y calidad, debido al tema del alto costo de la vida.
El Estado debe intervenir
Janeth Márquez aseguró que es vital que el Estado intervenga en este tema de manera “seria” para evitar consecuencias mayores.
“La idea no es ser alarmista ni amarillista, sino saber cuál es la situación de nuestros niños. La iglesia realmente siempre ha estado acompañando a la gente, pero ahora como tenemos datos queremos ver cómo con los pocos recursos que tenemos los podemos invertir de la mejor manera, pero solo podemos apoyar al 5 %, lo que quiere decir que hay un 95 % al margen”, comentó.
“Por eso la insistencia de que se creen políticas para atender a estos niños y la familia en general, porque un niño desnutrido nos dice que viene de unas condiciones deplorables”, añadió.
Señaló que se han mantenido reuniones con funcionarios del Ejecutivo nacional donde se les ha hecho recomendaciones para realizar políticas “focalizadas” a los más afectados.
“En nuestras encuestas mucha gente dice que recibe la bolsa Clap, pero hay familias que no la reciben. Nuestra recomendación es que estas bolsas vayan dirigidas a familias focalizadas”, indicó. “Y que tenga una secuencia menos larga, porque se entrega cada un mes, y realmente solo alcanza para una semana o diez días”, sentenció.
Por Braulio Polanco